Después de lavarse la cara y verse detenidamente un rato al espejo, piensa
Los golpes no parecen tan severos, creo que me duele mas el orgullo, que te den una paliza entre dos no es gracioso aunque al final lo hiciste bien, aprovechaste muy bien los descuidos y los acabaste, aunque cada día te cuesta mas trabajo, todos tenemos un tiempo y quizá el mío ya paso, aunque quien sabe, podría tomar mi segundo aire, bueno, eso si amanezco, je je je -
Y se ríe con esa risa suya que asusta, abre del botiquín tras el espejo, toma un pomo de aspirinas, saca dos y las comienza a masticar, guarda todo y se tira en su vieja cama de hotel de mala muerte.
El sueño siempre es igual, veo el cuerpo de mi mujer en la sala de nuestra casa, tirado, mi primer instinto es reanimarla, le grito, la sacudo, imposible, le grito tan fuerte que me duele la garganta y no responde, se que esta muerta pero algo dentro de mí, me pide que no me rinda, me sorprendo a mi mismo rezando, volteo buscando respuestas, primero pienso en alguien que me quiere ver destruido, tengo muchos enemigos, no hay nadie, soledad, obscuridad, despierto asustado...
Gahhhh!! Debo dejar de tomar esta basura! -
dejó el vaso en el mismo lugar donde lo había tomado y regreso a la cama, quiere dormir pero sus pensamientos no se lo permiten, se abandona al sueño ya de madrugada solo por el cansancio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario