Nuevo ingreso

Eran las tres de la mañana y yo no podía dormir, estaba demasiado ansioso, me levantaba cada diez minutos y veía el reloj, me parecía que le tiempo transcurría tan lento, en un momento dado, dieron las seis de la mañana y me levante a bañarme, curiosamente ahí me empezó a dar sueño, no había dormido mucho, después de eso, desayune un poco de cereal y salí de mi casa, era el gran día…

Llegue a la preparatoria y mis piernas empezaron a temblar, pregunte en el módulo de información y me dijeron que en las ventanas del salón 4B estaban las listas, agradecí entre dientes y con los nervios de punta me dirigí hacia allá, mis nervios llegaron al límite cuando al acercarme una niña salió de entre la gente que ahí estaba amontonada gritoneando…

- No pasé, no pasé!!!

Su cara se empezaba a descomponer, supuse que empezaría a llorar, yo tenía mis propios problemas, no podía acercarme mucho a las listas y esa maldita costumbre de publicar listas con letra del tamaño de hormigas con tinta casi transparente no ayuda mucho al momento, como pude, después de algunos empujones me encontraba frente a las listas, no había mucho que decir ó hacer, recorrí la primera hoja de los alumnos de nuevo ingreso acompañando mi vista con mi dedo índice, nada, no estaba ahí, aún hay más listados pensé, recorrí la segunda hoja, nada, mi esperanza se empezaba a volver frustración cuando a la mitad de la tercer hoja apareció, ficha 225 turno matutino, simplemente sonreí y forme con mi mano un puño en señal de triunfo, nunca he sido un tipo de grandes demostraciones de euforia hoy no sería diferente, aunque mi día y mi vida gracias a esto tomaban ese día cierto rumbo, es curioso el grado de emociones que despierta un acto como revisar un listado de admisión…